Siempre me llamaron la atención esos grandes carteles que en letras gigantes indican: NUEVA GERENCIA, o tal vez nueva administración.
Es frecuente verlos en estaciones de servicio o gasolineras, y en restaurantes y negocios de hostelería. Normalmente negocios que han sido traspasados y que mantienen el mismo nombre y muchas veces la estética y el diseño.
Detrás de ese cartel suele haber una historía de mala gestión, que hizo que la clientela empezara a dejar de acudir al negocio, hasta que llegó un punto de no retorno en el que la empresa es traspasada y una nueva gerencia asume el control.
Y entonces viene el dilema de mantener nombre y formato o cambiarlo todo y empezar de cero.
Mi experiencia, como observador, es que mantener el nombre es bueno cuando o bien es una marca muy implantada y que tuvo tiempos mejores, pero que el recuerdo colectivo hace que tenga cierto posicionamiento a pesar de todo, o por supuesto hay que mantenerla cuando hay una obligación legal/contractual, como es en el caso de las gasolineras.
¿Y qué debe hacer una nueva gerencia?
Demostrar que efectivamente hay un antes y un después, que ahora hay un mejor servicio o resultado que impacte en el cliente. Decir que hay una Nueva Gerencia y no reaccionar y seguir con la misma mecánica no sirve de nada. Los clientes te darán una nueva oportunidad, pero nunca una segunda.
No se cambia por poner un cartel, se cambia cuando hay acciones que transforman la realidad de la empresa y por tanto la de los clientes.
Muchas gracias por estar aquí.
Te deseo lo mejor.
Jacinto Llorca